La película de color más antigua del mundo, rodada en 1902 por Edward Turner, ha sido rescatada y digitalizada en los Archivos del National Media Museum en Bradford.
Edward Turner patentó su método de captura de movimiento en color una década antes de la invención del Technicolor. Filmó escenas de la calle de Londres, de su loro y sus tres hijos jugando con un pez en el jardín.
Su proceso de filmación se consideró inviable porque las imágenes se mostraban borrosas. Su obra nunca fue vista en público y Turner fue rápidamente olvidado.
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