El archivo de la República de Sudán del Sur, nación independiente desde el 9 de julio de 2011, intenta sobrevivir a la humedad, el calor, las ratas y las termitas.
"No podemos dejar que nuestra historia se destruya por las termitas, las ratas y el agua. Debemos salvar estos documentos", explica Youssef Fulgensio Onyalla, una de las personas que en 2007, después de casi medio siglo de guerras civiles, descubrió lo esencial de este archivo bajo el suelo de una escuela.
A principio de la década de 1980 se habían dejado allí los documentos, recuperados de las administraciones locales, para protegerlos del conflicto.
Financiado por Noruega, se espera que en 2014 se construya un edificio que preserve el archivo para el futuro. Mientas tanto, Youssef Fulgensio seguirá intentando salvar la memoria del país.
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