Un estudiante de derecho encontró 1.222 páginas con información suya, incluidos mensajes borrados que Facebook no eliminó definitivamente, y que siguió conservando en sus archivos digitales.
La red social analizó de forma sistemática todos sus datos sin pedirle su consentimiento: "Facebook sabe más de nosotros de lo que la Stasi y la KGB sabía sobre cualquier ciudadano normal", reflexiona.
El hallazgo fue la clave para iniciar un pulso con el gigante de Internet que se prolongó en 22 reclamaciones ante el organismo irlandés para la protección de datos (DPC), que acabó dándole la razón.
Después de una investigación de tres meses por parte de las autoridades irlandesas, la red social se comprometió el pasado miércoles a mejorar la privacidad de los alrededor de 500 millones de usuarios que dependen de las oficinas de la empresa en Dublín.
Las mejoras que Facebook aplicará incluyen una mayor transparencia en la gestión de las informaciones personales, como impedir utilizar una imagen del usuario para fines comerciales sin su consentimiento y eliminar la información que la red social obtiene a través del botón "me gusta", entre otros aspectos.
1 comentario:
Lamentablemente, sólo lo harán en Irlanda.
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