18 nov 2009

Una extrabajadora del Ministerio de Vivienda generó sin quererlo una cadena de emails indeseados.
Poco podía imaginar María Ángeles Yáñez Moreno, cuando reenvió hace más de dos años un e-mail aparentemente inofensivo a sus compañeros de trabajo, que su nombre iba a dar la vuelta al mundo. El e-mail, titulado Como sea verdad nos forramos, era uno de esos mensajes engañosos que se propagan por la red con el objetivo de recopilar direcciones de correo y desafortunamente Yáñez reenvió el correo desde su dirección de trabajo, que no era otro que el Ministerio de Vivienda.
«Hice un corta y pega y me olvidé de borrar la firma al reenviarlo». La firma especifica su cargo como secretaria de la subdirección general de la Oficina Presupuestaria, situada en el paseo de la Castellana, 112, con número de teléfono y fax incluidos.
«Yo no certifico nada de lo que dice el e-mail, solo lo reenvié. Y ahora no lo puedo parar –dijo Yáñez, que ahora trabaja en el Ministerio de Fomento–. Además, ese mensaje es mentira, si no, sería millonaria». Le han aconsejado que acuda a la Guardia Civil, pero aún no lo ha hecho.
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3 comentarios:

Angelripper dijo...

Que se joda, si se dedicaran a currar en vez de enviar correo basura a sus contactos no le habria pasado eso. Asi van las cosas que luego tienes que esperar mil años para que gestionen las ayudas.

Anónimo dijo...

Para que coño pagamos a tantos funcionarios, para eso, para que se dediquen todo el puto dia a enviar mensajes absurdos... conozco a varios de esta especie y parece ser que en general se aburren un monton ya que suelen hacer lo mismo que la señorita esta. Yo creo que no la tenian que haber desplazado de un ministerio a otro, si no que como a cualquier otro trabajador se le hubiese preparado el despido y de patitas a la calle. Que vergüenza de funcionarios que tenemos en este pais.

Anónimo dijo...

¿Por qué mandan anónimos?
A lo mejor es que quisieron ser funcionarios y no pudieron