13 dic 2010

Los servidores de WikiLeaks están a salvo en un búnker.
En un barrio elegante de Estocolmo, dentro de una colina cubierta de nieve, coronada por una iglesia, se encuentra el búnker antinuclear que alberga el centro informático futurista donde permanecen almacenados unos ocho mil servidores, dos de los cuales son de WikiLeaks.
“Toda esta algarabía planetaria es creada por esas dos pequeñas cajas”, explica el patrón fundador de Banhof, Jon Karlung, al mostrar las instalaciones que fueron cavadas en la roca.

Este búnker llamado “pionen” (peonía) fue construido en el barrio de Södermalm a mediados de los años 1940 y luego transformado en un refugio antinuclear en plena Guerra Fría.
Luego sirvió como sala de exposición en los años 1990, antes de ser retomado hace unos años por Banhof, que implantó allí su quinto centro de almacenamiento de datos informáticos, el más pintoresco de todos.
“Estamos muy bien protegidos contra ataques físicos, pero no nos arriesgamos a eso. La amenaza real puede ser jurídica y con mayor probabilidad los ciberataques”, subrayó Karlung.
Más información

No hay comentarios: