El expediente digital se abre paso.
Trabajar entre legajos, polvo y excrementos de rata se va a acabar. La Justicia del siglo XXI llega sin haber pasado por el XX, al fin, con la revolución del expediente digital. La Audiencia Nacional ha comenzando la implantación del expediente electrónico para terminar con las montañas de papel que inundan los juzgados. Las Salas de Gobierno de cinco Tribunales Superiores de Justicia (TSJ), incluido el de la Comunitat Valenciana, siguen el mismo camino en esta primera fase de modernización que se integra en el Plan Estratégico de Modernización del Ministerio de Justicia para los próximos tres años.
«Téngase presente y agréguese por cuerda floja el Expediente Nº....». Esta frase desaparecerá de las resoluciones judiciales. Hay que tener en cuenta que, todavía hoy, las leyes disponen que los asuntos o legajos se unan con cuerda floja. Todo esto cambiará con la reforma de las leyes procesales que acaba de aprobar el Congreso y que ha significado el pistoletazo de salida para poner en marcha la nueva Oficina Judicial.
El programa se implantará primero en la Audiencia Nacional, en el orden penal, y durará aproximadamente un año con una inversión de más de cuatro millones de euros.
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Trabajar entre legajos, polvo y excrementos de rata se va a acabar. La Justicia del siglo XXI llega sin haber pasado por el XX, al fin, con la revolución del expediente digital. La Audiencia Nacional ha comenzando la implantación del expediente electrónico para terminar con las montañas de papel que inundan los juzgados. Las Salas de Gobierno de cinco Tribunales Superiores de Justicia (TSJ), incluido el de la Comunitat Valenciana, siguen el mismo camino en esta primera fase de modernización que se integra en el Plan Estratégico de Modernización del Ministerio de Justicia para los próximos tres años.
«Téngase presente y agréguese por cuerda floja el Expediente Nº....». Esta frase desaparecerá de las resoluciones judiciales. Hay que tener en cuenta que, todavía hoy, las leyes disponen que los asuntos o legajos se unan con cuerda floja. Todo esto cambiará con la reforma de las leyes procesales que acaba de aprobar el Congreso y que ha significado el pistoletazo de salida para poner en marcha la nueva Oficina Judicial.
El programa se implantará primero en la Audiencia Nacional, en el orden penal, y durará aproximadamente un año con una inversión de más de cuatro millones de euros.
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1 comentario:
Los males que aquejan a la justicia no se van a acabar con los documentos electrónicos, se acaban trabajando y poniendo a los de justicia a trabajar, empezando por jueces y secretarios judiciales, sea en el soporte que sea.
Esto de hablar de "la lacra" del papel (San Benito los perdone) está rodeado de demasiados intereses: de los vendedores de tecnología, que esperan llenar sus bolsillos, de los funcionarios que dicen que tienen una carga de trabajo abrumadora y trabajan muchísimo (¡en justicia! XD), o de la propia administración que mientras se habla de la "lacra" del papel se gana tiempo para poner a los de justicia a trabajar como en cualquier otra administración, porque ese en realidad es el problema. Que por muchos medios electrónicos y soportes supermegamodernos, el trabajo no se hace solo.
Hoy leía la opinión (chapeau) de un funcionario de justicia comentando las quejas sindicales acerca de lo pocos que son en unos juzgados de guardia y de la abrumadora, terrible, y tal y tal y tal, carga de trabajo que los que protestan dicen tienen, y confirma con su propia experiencia lo que sabe todo el mundo:
"Cierto es que la plantilla es la misma, no obstante hace 20 años se carecía de los medios informáticos ahora existentes. También es cierto que el personal, comenzando por los Jueces, se niegan sistematicamente a la utilización debida y completa del programa informatico. Se multiplican los procedimientos para hacer número; a modo de ejemplo si el Juzgado ya tiene incoadas unas diligencias, y a continuación se recibe un parte médico, o un informe policial, o un atestado, se incoa por cada uno de ellos otras diligencias, y seguidamente acumulan; es decir se está inventando trabajo para hacer número y seguidamente pedir más juzgados. En cuanto a lo del horario produce hilaridad decir que alguno trabaja 80 horas a la semana, menudo morro; la media de horas/día que trabaja un funcionario es de 5, y entre estas hay que descontar el tiempo de salidas a "diligencias cafeteras". Y esto lo dice alguien que lleva más de treinta años de funcionario".
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