La administración Bush sigue dando muestras de transparencia administrativa. La oficina del vicepresidente Dick Cheney ha rechazado en numerosas ocasiones enviar documentos secretos a la agencia que los supervisa (National Archive’s Information Security Oversight Office: ISSO). El demócrata Henry Waxman ha criticado los presuntos esfuerzos del vicepresidente por evitar proporcionar datos a la ISSO. Es más, cuando Cheney se sintió excesivamente presionado por esa agencia para revelar sus secretos, intentó cerrarla.
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