Polonia ha rechazado las llamadas para que devuelva a los alemanes los documentos que obran en sus archivos, incluyendo los manuscritos originales de Goethe, de Beethoven, de Mozart y de Bach. En la Segunda Guerra Mundial los alemanes pusieron a salvo sus tesoros en diversos lugares de Europa. Tras la contienda parte de sus archivos quedaron en territorio polaco.
Evidentemente, los documentos que Polonia custodio son de gran importancia cultural. Si nos basamos en el Principio de Procedencia y Orden natural, toda documentacion creada por un mismo organo productor debe ser conservada por dicha institucion o su dependencia correspondiente. En este caso, el gobierno alemán.
ResponderEliminarSaludos. Muy buen blog